Infolinks In Text Ads

.

Enter your email address:

Delivered by FeedBurner

.

GOTICO

↑ Grab this Headline Animator

Creative Commons License Esta obra es publicada bajo una licencia Creative Commons. PELICULAS PELICULAS on line JUEGOS BEN 10 VIDEOS + DIVERTIDOS LA BELLA SUDAFRICA RINCONES DEL MUNDO COSMO ENLACES DIRECTORIO PLANETARIO CREPUSCULO CORTOS DE CINE SALIENDO DEL CINE SERIES Carro barato japon Cursos first certificate en bilbao
INFOGRAFIA ESTORES ALQUILER DE AUTOS EN LIMA HURONES POSICIONAMIENTO WEB ¡Gana Dinero con MePagan.com! Herbalife Amarres de amor Union de parejas Desarrollo de software a medida Bolas chinas Comprar en china Amarres de Amor Hosting Peru Noticias Anime Actualidad de cine Ver peliculas

Las tres leyes robóticas 1. Un robot no debe dañar a un ser humano o, por su inacción, dejar que un ser humano sufra daño. 2. Un robot debe obedecer las órdenes que le son dadas por un ser humano, excepto cuando estas órdenes están en oposición con la primera Ley. 3. Un robot debe proteger su propia existencia, hasta donde esta protección no esté en conflicto con la primera o segunda Leyes. Manual de Robótica 1 edición, año 2058

-

-

.

-

Seguidores

martes, 5 de enero de 2010

La Jaula - A. Bertram Chandler


L

La Jaula

A. Bertram Chandler

El encarcelamiento es siempre una experiencia humillante, sea cual fuere el

espíritu filosófico del prisionero. El encarcelamiento que nos inflige alguien de

nuestra propia especie es muy desagradable, pero se puede hablar a los que

nos han capturado, cabe conseguir que lo comprendan a uno al exponer sus

necesidades, en ciertas ocasiones incluso apelar a ellos de hombre a hombre.

Pero el encarcelamiento constituye una humillación doble cuando los

captores nos tratan como a un animal de especie inferior.

La partida del cohete patrulla podría, quizás, ser disculpada por no

haber reconocido como seres racionales a los supervivientes de la nave de

línea interestelar Lode Star. Habían transcurrido doscientos días por lo menos,

desde su aterrizaje en el planeta innominado, un aterrizaje forzoso que se

produjo cuando los generadores Ehrenhaft de la Lode Star, obligados a

trabajar con gran exceso sobre su capacidad normal por una avería del

regulador electrónico, la hicieron volar lejos de las rutas regulares hasta una

región inexplorada del espacio. La Lode Star había aterrizado con bastante

facilidad, pero poco después (las desgracias nunca vienen solas), su pila

atómica se hizo incontrolable y el capitán ordenó al primer oficial que

evacuase a los pasajeros ¾los cuales no tenían por qué soportar la

emergencia¾, llevándolos tan lejos como fuese posible.

Hawkins y el personal a su cargo se hallaban ya bastante lejos cuando

se produjo un fogonazo de energía liberada y una explosión no muy violenta.

Los supervivientes deseaban volver para presenciarlo, pero Hawkins los hizo

seguir adelante con maldiciones y, a veces, golpes. Afortunadamente estaban

a sotavento de la nave y así escaparon a los efectos de la explosión.

Cuando los fuegos artificiales parecieron teminar, Hawkins,

acompañado por el doctor Boyle, el cirujano de la nave, regresó al lugar del

desastre. Los dos hombres, temerosos de la radiactividad, fueron precavidos y

se mantuvieron a una prudente distancia del cráter poco profundo y humeante

aún, que indicaba dónde estuvo la nave. Era evidente que el capitán, sus

oficiales y técnicos constituían ahora una parte infinitesimal de la nube

incandescente en forma de hongo.

Después de esto, los cincuenta y tantos hombres y mujeres,

supervivientes de la Lode Star, estaban cambiando. No fue un proceso rápido,

ya que Hawkins y Boyle, ayudados por un comité de los pasajeros más

responsables, habían combatido en una obstinada acción de retaguardia. Pero

la suya era una lucha sin esperanza. El clima estaba en su contra, para

empezar. Hacía calor, siempre en las cercanías de los treinta grados. Y había

humedad, cayendo incesantemente una fina y cálida llovizna. El aire parecía

rico en esporas de hongos que, por fortuna, no atacaban a la piel viva, pero

medraban en la materia orgánica muerta y sobre las ropas. Se desarrollaban

en un grado ligeramente menor en los metales y sobre los tejidos sintéticos

que usaban muchos de los náufragos.

El peligro, un peligro exterior, hubiese contribuido a mantener la moral.

Pero allí no existían animales peligrosos. Sólo existían pequeñas cosas de piel

suave, no muy diferentes de las ranas, que avanzaban a saltitos a través de la

maleza húmeda, y criaturas semejantes a peces en los numerosos ríos, que

variaban en tamaño desde el tiburón al renacuajo y que poseían toda la

belicosidad del primero.

El alimento no significó un problema, pasadas las primeras horas de

hambre. Algunos voluntarios habían probado un hongo grande y suculento que

crecía en los huecos de unos corpulentos árboles semejantes a helechos.

Decidieron que tenía buen sabor. Tras un lapso de cinco horas, no habían

muerto ni se quejaban de dolores abdominales. Aquel hongo constituiría la

dieta habitual de los náufragos. En las semanas que siguieron, se encontraron

otros hongos, bayas y raíces, todos ellos comestibles. Proporcionaban una

ración gratamente recibida.

Pese al calor penetrante, el fuego era lo que más echaban de menos.

Con él podrían haber completado su alimentación, cociendo los pequeños

seres parecidos a ranas del bosque lluvioso y los peces de los riachuelos.

Quienes mostraban un espíritu más esforzado, comían estos animales crudos,

pero la mayor parte de los demás miembros de la comunidad los miraban con

asco. El fuego les hubiese ayudado también a retrasar la oscuridad de las

largas noches y, gracias a su calor y a su luz, desvanecer la ilusión de frialdad

producida por el incesante rocío de todas las hojas y frondas.

Al huir de la nave, la mayoría de los supervivientes poseían

encendedores de bolsillo, pero se perdieron con la desintegración de sus

ropas. En todo caso, cualquier intento de encender una fogata en los primeros

días, hubiese fallado al no existir, según aseguró Hawkins, un solo sitio seco

en todo aquel maldito planeta. Hacer fuego ahora resultaba completamente

imposible; aun cuando se hubiese contado entre ellos un experto en frotar dos

ramitas secas, no hubiera encontrado material con que trabajar.

Se establecieron de modo permanente en la cima de una colina de

escasa altura. (Allí no existía, en lo que podía distinguir la vista, ninguna

montaña.) El bosque era allí menos espeso que en las llanuras circundantes, y

el terreno menos pantanoso. Trenzando frondas de los helechos árboles,

consiguieron construir unos refugios primitivos, más por motivos de

aislamiento que por las comodidades que con ello pudieran obtener.

Recurrieron con cierta desesperación a las formas gubernamentales de los

mundos que habían abandonado para elegir un consejo. Boyle, el cirujano de

la nave, fue su jefe. Hawkins fue rechazado sólo por dos votos, debido al

resentimiento de muchos pasajeros, que atribuían al personal ejecutivo de la

nave la responsabilidad por haberlos arrastrado a la presente situación.

La primera reunión del consejo tuvo lugar en una choza ¾si así pudiese

llamarse¾, construida especialmente para tal propósito. Los miembros del

consejo se acurrucaron en cuclillas formando un círculo. Boyle, el presidente,

se puso de pie con lentitud. Hawkins sonrió con despecho al comparar la

desnudez del cirujano con la pomposidad que parecía haber asumido en su

rango electivo, confrontando la dignidad del hombre con la desaliñada

apariencia que ofrecía su cabello gris, sin cortar ni peinar, y su desordenada y

grisácea barba.

¾Señoras y caballeros ¾comenzó Boyle.

Hawkins miró en torno suyo los cuerpos desnudos y pálidos, los

cabellos fibrosos y sin brillo, las largas uñas sucias de los hombres y los labios

sin pintar de las mujeres. Pensaba que su aspecto tampoco era el de un oficial

y un caballero.

¾Señoras y caballeros ¾continuó Boyle¾. Hemos sido elegidos para

representar a la comunidad humana sobre este planeta. Sugiero que en esta

primera reunión discutamos nuestras probabilidades de supervivencia, no

como individuos sino como raza...

¾Quisiera preguntar al señor Hawkins cuáles son nuestras

probabilidades de ser rescatados ¾preguntó una de las dos mujeres que

componían el consejo, una criatura seca, con aspecto de solterona, de

costillas y vértebras prominentes.

¾Insignificantes ¾respondió Hawkins¾, como ya sabe, no es posible

ninguna comunicación con otras naves espaciales ni con estaciones

planetarias cuando se está operando en el Sendero Interestelar. Cuando

salimos del Sendero y vinimos a parar aquí en nuestro desgraciado aterrizaje,

lanzamos una llamada de auxilio, pero no pudimos explicar nuestro paradero.

Además, no sabemos si la llamada fue recibida o no...

¾Señorita Taylor ¾cortó Boyle malhumorado¾. Señor Hawkins.

Quisiera recordarles que soy el presidente electo de este consejo. Ya

tendremos tiempo después para una discusión general.

»Como la mayor parte de ustedes habrá supuesto ya, la edad de este

planeta, biológicamente hablando, corresponde a la de la Tierra durante el

período Carbonífero. Sabemos que todavía no existen especies que nos

disputen nuestra supremacía. Con el tiempo tales especies surgirán (análogas

a los lagartos gigantes fósiles de la Era Triásica), pero entonces estaremos

sólidamente establecidos...

¾¡Estaremos muertos! ¾exclamó uno de los hombres.

¾Estaremos muertos ¾convino el doctor¾, pero nuestros

descendientes sí estarán vivos. Tenemos que pensar en facilitarles el mejor

punto de partida posible. El lenguaje que les legaremos...

¾No me interesa el lenguaje, doctor ¾chilló el otro miembro femenino.

Era una rubia pequeña, delgada, de expresión dura¾. Es a mí a quien

concierne la cuestión de los descendientes. Represento a las mujeres en edad

de procrear..., somos quince aquí. Hasta ahora las muchachas han sido

extremadamente cuidadosas. Tenemos razones para ello. ¿Puede garantizar,

como médico, no disponiendo de drogas ni instrumentos, alumbramientos sin

peligro? ¿Puede garantizar que nuestros hijos tendrán una buena probabilidad

de supervivencia?

Boyle se desprendió de su pomposidad como de una prenda de vestir

muy usada.

¾Seré franco ¾dijo¾. No dispongo, tal como usted apuntó, señorita

Hart, de drogas ni de instrumentos. Pero puedo asegurarle que sus

probabilidades de alumbramiento sin peligro son mucho mejores que las

usuales en la Tierra durante, digamos, el siglo dieciocho. Le explicaré el

motivo. En este planeta, que nosotros sepamos (y ya llevamos aquí lo

suficiente para saberlo), no existen microorganismos nocivos al hombre. En el

caso contrario, los que hemos sobrevivido seríamos ahora simples masas de

supuración. La mayoría de nosotros, desde luego, hubiésemos muerto de

septicemia hace tiempo. Creo que esto contesta las preguntas de ustedes dos.

¾No he terminado aún ¾insistió ella¾. Existe otro punto a considerar.

Somos aquí cincuenta y tres, entre hombres y mujeres. Hemos contado diez

matrimonios. Esto significa treinta y tres individuos solteros, de los cuales

veinte son hombres. Veinte hombres para trece mujeres. Todas nosotros

somos jóvenes, pero también somos mujeres. ¿Qué clase de fórmula

estableceremos? ¿Monogamia? ¿Poliandria?

¾Monogamia, naturalmente ¾exclamó un hombre alto y delgado. Era

el único entre los presentes que iba vestido, si así podía considerarse un

sarmiento de vid arrollado a la cintura.

¾De acuerdo, entonces ¾observó la muchacha¾. Monogamia. La

prefiero, desde luego. Pero le advierto que si vamos a seguir esta línea,

surgirá un conflicto. En cualquier asesinato cuyos móviles sean la pasión y los

celos, la mujer resulta tan posible víctima como el hombre, y no quiero verme

complicada en eso.

¾¿Qué propone entonces, señorita Hart? ¾preguntó Boyle.

¾Sólo esto, doctor. Cuando llegue el momento, dejaremos a un lado el

amor. Si dos hombres desean casarse con la misma mujer, que peleen por

ella y el mejor la conseguirá y la conservará.

¾Selección natural... ¾murmuró el cirujano¾. Estoy a favor, pero

debemos ponerlo a votación.

En la cima de la loma había una depresión poco profunda, un

cuadrilátero natural. Alrededor de sus bordes se sentaron los náufragos, todos

menos cuatro. Uno de ellos era el doctor Boyle, consciente que sus deberes

presidenciales incluían los de árbitro. Se decidió que sería la persona más

competente para declarar vencido a uno de los competidores. Otro miembro

de este grupo era la joven Mary Hart. Había encontrado una varita dentada

para peinar sus largos cabellos y tejido una guirnalda de flores amarillas, con

la que pensaba coronar al vencedor. Hawkins se preguntó, al tomar asiento

entre los otros miembros del consejo, si aquello significaba el deseo de imitar

una ceremonia matrimonial terrestre, o bien pretendía resucitar algo más

perverso.

¾Fue una lástima que las cenizas de la explosión cayeran sobre

nuestros relojes ¾dijo el hombre grueso sentado a la derecha de Hawkins¾.

Si tuviéramos algún sistema para medir el tiempo, podríamos establecer

asaltos, y hacer de esto un combate de boxeo reglamentario.

Hawkins inclinó la cabeza. Miraba al curioso grupo en el centro del

cuadrilátero: una petulante mujer bárbara, un pomposo anciano y dos jóvenes

de oscura barba con cuerpos blancos y relucientes. Los conocía a ambos.

Fennet había sido tripulante de la desdichada Lode Star. Clemens, por lo

menos siete años mayor que él, era un pasajero y había sido prospector de

minas en los mundos de la frontera.

¾Si tuviéramos algo para apostar ¾apuntó el hombre gordo¾, lo haría

por Clemens. Ese cadete suyo no tiene nada que hacer. Ha sido educado para

jugar limpio, Clemens está acostumbrado precisamente a lo contrario.

¾Fennet se encuentra en mejores condiciones ¾repuso Hawkins¾. Ha

estado haciendo ejercicio, mientras que Clemens no hizo sino dormir y comer.

¡Fíjese que panza tiene!

¾No poseen nada de malo la carne sana y los músculos fuertes

¾afirmó el hombre gordo, dándose palmadas en el vientre.

¾¡Prohibido morderse y sacarse los ojos! ¾intervino el doctor¾. ¡Que

gane el mejor!

Se separó vivamente de los contrincantes, quedando de pie junto a

Mary Hart.

Ambos luchadores parecían preocupados, con los puños en tensión.

Los dos tenían aire de deplorar que las cosas hubiesen llegado a tal extremo.

¾¡Adelante! ¾chilló al fin Mary Hart¾. ¿No me deseáis? Vais a vivir

aquí mucho tiempo y os sentiréis muy solos sin una mujer.

¾Siempre podrían esperar hasta que tus hijas crecieran, Mary

¾bromeó uno de sus amigos.

¾¿Y si no tengo hijas? ¾arguyó ella¾. ¡A este paso, desde luego que

no!

¾¡Adelante! ¾chilló la multitud¾. ¡Adelante!

Fennet inició el ataque. Avanzó desconfiado, golpeando débilmente con

su puño derecho la cara mal protegida de Clemens. No fue un golpe duro,

pero debió resultar doloroso. Clemens se llevó la mano a la nariz, la retiró y

quedó mirando la sangre brillante que la manchaba. Profirió un gruñido, se

adelantó pesadamente con los brazos abiertos para hacer presa en su

enemigo. El joven saltó hacia atrás, golpeando dos veces más con la derecha.

¾¿Por qué no lo golpea de verdad? ¾preguntó el hombre grueso.

¾¿Para romperse todos los huesos del puño? No llevan guantes,

amigo ¾repuso Hawkins.

Fennet decidió intentar una finta. Se mantuvo firme, con los pies

ligeramente separados, y puso en juego su derecha una vez más. Esta vez su

blanco no fue el rostro de su contrincante, sino el vientre. Hawkins se

sorprendió al ver que el prospector encajaba los golpes con aparente

ecuanimidad. Debía ser, pensó, mucho más resistente de lo que aparentaba

en realidad.

El cadete saltó a un lado vivamente... y resbaló en la hierba húmeda.

Clemens cayó pesadamente sobre él. Hawkins pudo oír el silbido del aire

saliendo forzado de los pulmones del muchacho. Los gruesos brazos del

prospector rodearon el cuerpo de Fennet, cuando la rodilla de éste se lanzó

rencorosamente contra la ingle de su adversario. Clemens emitió un gemido,

pero continuó apretando fieramente. Una de sus manos rodeaba ahora la

garganta de Fennet; la otra, con los dedos malignamente engarfiados, intentó

clavarse en los ojos del cadete.

¾¡Prohibido sacarse los ojos! ¾gritó Boyle¾. ¡Prohibido sacarse los

ojos!

Se arrodilló para asir con ambas manos la gruesa muñeca de Clemens.

Algo hizo que Hawkins levantara la vista. Debía ser un sonido, aunque

era difícil: los espectadores estaban gritando como hinchas del boxeo en un

combate profesional. Apenas podía culpárseles, pues aquella era la primera

ocasión para divertirse que habían tenido desde la pérdida de la nave. Debió

ser en realidad el sexto sentido que poseen todos los buenos navegantes del

espacio. Lo que vio le hizo lanzar un grito.

Un helicóptero se cernía sobre el cuadrilátero. Su diseño, sutilmente

extraño, indicó a Hawkins que no se trataba de un aparato terrestre.

Repentinamente, de su parte inferior cayó una red, al parecer de metal.

Envolvió a los luchadores, atrapando también al doctor y a Mary Hart.

Hawkins volvió a gritar un chillido inarticulado. Incorporándose, se lanzó

en auxilio de sus enredados compañeros. La red parecía como si estuviese

viva. Retorcía alrededor de sus muñecas, ataba sus tobillos. Algunos otros

náufragos corrieron a ayudar a Hawkins.

¾¡No os acerquéis! ¾advirtió¾. ¡Dispersaos!

El débil zumbido de los rotores del helicóptero aumentó en intensidad.

La máquina se elevó en el aire. En un tiempo extraordinariamente breve, el

cuadrilátero se redujo ante la vista del primer oficial a un pequeño círculo

verde pálido, en el cual unas hormigas se escurrían sin dirección de un lado a

otro. La máquina voladora se movía ya entre las nubes bajas envuelta en un

blanco vacío.

Cuando, al fin, efectuó el descenso, Hawkins no se sorprendió al ver

entre los árboles la torre plateada de una gran nave espacial inmóvil en una

meseta llana.

El mundo al que fueron trasladados habría constituido una señalada

mejora sobre el que acababan de dejar, de no ser por la equivocada bondad

de sus captores. La jaula donde los tres fueron alojados reproducía, con

notable fidelidad, las condiciones climáticas del planeta sobre el que se perdió

la Lode Star. Estaba acristalada y desde unos rociadores situados en el techo

caía una constante llovizna de agua templada. Un par de helechos aburridos

proporcionaba cierto refugio contra el deprimente y continuo aguacero. Dos

veces diarias en la parte trasera de la jaula, hecha al parecer de hormigón, se

abría una compuerta y por ellas les arrojaban tabletas de un hongo

decididamente similar al que había constituido su alimento. En el suelo de la

jaula existía un hoyo; los prisioneros supusieron acertadamente que tenía un

propósito sanitario.

A ambos lados había otra jaula. En una de ellas estaba Mary Hart, sola.

Podía hacerles gestos y ademanes de saludo, con la mano, y eso era todo. La

otra encerraba a una bestia cuyas líneas generales hacían pensar en una

langosta o un bogavante, pero con fuertes rasgos de calamar. Al otro lado de

la ancha calle se levantaban otras jaulas, pero no podían ver su contenido.

Hawkins, Boyle y Fennet, sentados en el húmedo suelo, miraban a

través de los gruesos cristales y los barrotes a los seres que los contemplaban

desde el exterior.

¾Aunque sólo fueran humanoides ¾suspiraba el doctor¾. Si su forma

fuera sólo un poco parecida a la nuestra, podríamos intentar convencerles que

nosotros también somos seres inteligentes.

¾Pero no tienen la misma forma ¾repuso Hawkins¾. Y en la situación

contraria, nos costaría trabajo admitir que tres barriles de cerveza con seis

patas eran hombres y nuestros hermanos... Prueba otra vez el teorema de

Pitágoras ¾indicó al joven.

Sin gran entusiasmo, Fennet arrancó frondas del helecho arborescente

más cercano. Las rompió en pedazos más pequeños; después, las colocó en

el suelo musgoso, formando la figura de un triángulo rectángulo, con los

cuadrados construidos sobre los tres lados. Los nativos ¾uno grande, otro

ligeramente menor y otro pequeño¾ lo miraban curiosamente con sus ojos

planos y opacos. El mayor metió la punta de un tentáculo en un bolsillo ¾las

cosas aquellas llevaban ropa¾ y sacó un paquete de brillantes colores, que

entregó al pequeño. Éste desgarró la envoltura y comenzó a introducir

pedazos de una materia azul brillante en la ranura de la parte superior, que

obviamente le servía de boca.

¾Me gustaría que les estuviera permitido dar comida a los animales

¾suspiró Hawkins¾. Estoy harto de esos malditos hongos.

¾Recapitulemos ¾dijo el doctor¾. Después de todo, no nos queda

más que hacer. Fuimos arrebatados, seis en total, de nuestro campamento por

el helicóptero. Nos condujeron a la nave de observación, que no parece muy

perfeccionada en relación a nuestros vehículos interestelares. Según usted,

Hawkins, esa nave emplea un propulsor Ehrenhaft, o algo tan parecido como

un hermano gemelo...

¾Exacto ¾aseveró Hawkins.

¾Ya dentro de la nave fuimos encerrados en jaulas separadas. No nos

dan mal trato, porque nos proporcionan alimento y agua a frecuentes

intervalos. Hemos desembarcado en este extraño planeta, pero no hay

posibilidad de ver algo más. Estamos encerrados a la fuerza en jaulas como

animales. Sabemos que nos conducen hacia alguna parte, pero eso es todo.

Cuando llegamos, la puerta se abre y esos barriles de cerveza ambulantes nos

apresan con pértigas provistas de redes. Cogieron a Clemens y a la señorita

Taylor y se los llevaron. No volvimos a verlos. El resto de nosotros pasa la

noche y las veinticuatro horas siguientes en jaulas individuales. Un día

después nos traen a este... zoo.

¾¿Cree que los sometieron a vivisección? ¾preguntó Fennet¾. Nunca

me ha gustado Clemens, pero...

¾Mucho me temo que sí ¾admitió Boyle¾. Nuestros amos conocerán

ahora la diferencia entre los sexos. Desgraciadamente, la vivisección no

permite descubrir inteligencia.

¾¡Brutos inmundos! ¾barbotó el joven.

¾Calma, hijo ¾aconsejó Hawkins¾. No se les puede culpar. Hemos

practicado la vivisección en animales mucho más semejantes a nosotros de lo

que lo somos a esas cosas.

¾El problema ¾prosiguió el doctor¾ es convencer a esas cosas (como

usted las llama, Hawkins), que somos seres racionales como ellos. ¿Cómo

definiríamos nosotros a un ser racional?

¾Como alguien que conoce el teorema de Pitágoras ¾repuso Fennet,

enfurruñado.

¾Leí en alguna parte ¾observó Hawkins¾, que la historia del Hombre

es la historia del animal que descubrió el fuego y el uso de herramientas...

¾Hagamos fuego, entonces ¾sugirió el doctor¾. Construyamos

algunas herramientas y usémoslas.

¾No diga tonterías. No disponemos absolutamente de nada. Ni siquiera

de un diente postizo... Hizo una pausa. Recuerdo ahora que cuando era joven,

se pusieron de moda entre los cadetes de las naves interestelares los antiguos

trabajos de artesanía. Nos considerábamos descendientes en línea directa de

los tripulantes de los barcos a vela y aprendíamos a empalmar cuerdas y

cables, a trenzar sogas, nudos de fantasía y todas esas cosas. Entonces, uno

de nosotros tuvo la idea de hacer cestas. Prestábamos servicio en una nave

de turismo y acostumbrábamos fabricar nuestras cestas a escondidas, las

adornábamos después con colores vivos y las vendíamos a los pasajeros

como auténticos souvenirs del Planeta Perdido del Rey Arturo VI. Ya se

pueden imaginar lo que ocurrió cuando el capitán y el primer oficial lo

descubrieron...

¾¿Adónde quiere ir a parar? ¾preguntó el doctor.

¾A eso precisamente. Demostraremos nuestra destreza manual,

tejiendo cestas. Yo les enseñaré el procedimiento.

¾Podría resultar... ¾concedió Boyle lentamente¾. Podría servir, sí...

Por otra parte, no olvidemos que ciertos pájaros y animales poseen esta

habilidad. En la Tierra existe el castor, que construye presas muy ingeniosas;

el pájaro tejedor, que fabrica un nido cubierto para su compañera como parte

del ritual de enamoramiento...

Los guardianes del exterior debían conocer criaturas de hábitos

amorosos semejantes a los del pájaro tejedor de la Tierra. Después de tres

días de febril confección de cestas, que consumió todos los helechos

arborescentes, Mary Hart fue sacada de su jaula y metida en la de los tres

hombres. Una vez desahogada su histérica necesidad de hablar con alguien,

se mostró bastante indignada.

Era una suerte, pensó Hawkins algo amodorrado, tener de nuevo con

ellos a Mary. Unos días más de confinamiento solitario y la muchacha se

hubiese vuelto loca, probablemente. Pero su presencia en la misma jaula creó

algunos problemas. Hubo que vigilar a Fennet, incluso al viejo chivo de Boyle...

Mary chilló.

Hawkins despertó bruscamente. Vio la pálida silueta de Mary ¾en aquel

mundo nunca había noche de perfecta oscuridad¾ y, al otro lado de la jaula,

las sombras de Fennet y Boyle. Se puso apresuradamente en pie, y se dejó

caer junto a la muchacha.

¾¿Qué sucede? ¾preguntó.

¾No lo sé... Una cosa pequeña, con uñas afiladas... Me corría por

encima.

¾Oh ¾suspiró Hawkins¾, sólo fue «Joe».

¾¿Joe? ¾repitió sorprendida.

¾No sabemos exactamente si es varón o hembra.

¾Creo que es, decididamente, varón ¾intervino el doctor.

¾¿Qué es «Joe»? ¾insistió ella de nuevo.

¾Debe ser el equivalente local de un ratón ¾explicó el doctor¾,

aunque no se parezca mucho. Anda por todas partes, buscando sobras de

comida. Estamos tratando de domesticarlo...

¾¿Se han vuelto locos? ¾chilló ella¾. Hagan algo con él, ¡en seguida!

Tienen que envenenarlo, o atraparlo. ¡Ahora!

¾Mañana ¾dijo Hawkins.

¾¡Ahora! ¾exigió Mary con un chillido.

¾Mañana ¾repitió Hawkins con firmeza.

La captura de «Joe» resultó fácil. Dos cestas planas, engoznadas como

las valvas de una concha, sirvieron de trampa. Escondía un cebo en el interior,

un pedazo grande de hongo. Dispusieron ingeniosamente un palito vertical

para que cayera al menor tirón que moviera el cebo. Hawkins, insomne en su

húmedo lecho, escuchó el leve y sordo chasquido, que le avisó del

funcionamiento de la trampa. Escuchó los indignados gruñidos de «Joe» y las

menudas uñitas que arañaban el robusto material de la cesta.

Mary Hart estaba dormida y Hawkins la sacudió.

¾Lo hemos atrapado ¾dijo.

¾Entonces hay que matarlo ¾contestó ella, soñolienta.

Pero no lo hicieron. Los tres hombres le habían tomado cariño. Al

comenzar el día, lo trasladaron a una jaula que Hawkins había confeccionado

para él. Hasta la joven se aplacó cuando vio aquella bola inofensiva de piel

multicolor, que saltaba indignada, arriba y abajo, dentro de su prisión. Mary

insistió en alimentar al animalito, y gritaba con alegre vehemencia cuando los

finos tentáculos se alargaban para coger de sus dedos el fragmento de hongo.

Durante tres días se entretuvieron mucho con su mascota. Al cuarto,

sus guardianes entraron en la jaula con sus redes, inmovilizaron a sus

ocupantes y se llevaron a «Joe» y a Hawkins.

¾Me temo que no hay remedio ¾murmuró Boyle¾. Habrá corrido la

misma suerte...

¾Estará disecado y expuesto en algún museo ¾comentó Fennet

sombríamente.

¾No, no es posible ¾sollozó la muchacha¾. ¡No es posible!

¾Sí lo es ¾dijo el doctor.

Se abrió abruptamente la compuerta de la jaula. Antes que los tres

humanos pudieran buscar refugio en un rincón, se oyó una voz:

¾Todo está arreglado, pueden salir.

Hawkins entró en la jaula. Estaba afeitado y su aspecto parecía

saludable. Iba ataviado con unos pantalones cortos hechos de un material rojo

y brillante.

¾Salgamos ¾dijo otra vez¾. Nuestros huéspedes nos han presentado

sus más sinceras disculpas y han dispuesto un alojamiento más adecuado

para nosotros. Tan pronto como tengan una nave disponible, iremos a recoger

a los demás supervivientes.

¾No tan aprisa ¾exigió Boyle¾. Aclaremos esto. ¿Qué los hizo

comprender que éramos seres racionales?

El rostro de Hawkins se oscureció.

¾Únicamente los seres racionales encierran a otros seres en jaulas

¾dijo.

F I N

No hay comentarios:

Publicar un comentario

http://www.wikio.es Peliculas add page Wikio juegos gratis Blogalaxia  Ruleta  Apuestas Deportivas  Juegos  Peliculas  Turismo Rural  Series Online juegos

.

enlaces

Archivo del blog

Etiquetas

scifi (103) philip k. dick (56) SCI-FI (52) relato (51) Isaac Asimov (42) poul anderson (35) ray bradbury (33) Arthur C. Clarke (29) SCI-FI SPECIAL (29) fredric brown (12) Harry Harrison (11) alfred bester (10) cuento (10) SPECIAL (9) Brian W. Aldiss (7) Issac Asimov (7) douglas adams (7) cronicas marcianas (6) relatos (6) serie (6) star trek (6) star wars (6) varios autores (6) Clark Ashton Smith (5) Crimen en Marte (5) Philip K. Dick. (5) al abismo de chicago (5) antes del eden (5) paradoja (5) 334 (4) Arthur C.Clarke (4) Frederik Pohl (4) Robert A. Heinlein (4) Robert Silverberg (4) Thomas M. Disch (4) YLLA (4) creador (4) david lake (4) el nuevo acelerador (4) fantasía (4) gitano (4) guardianes del tiempo (4) recopilacion (4) Asimov (3) Bob Shaw (3) Civilizaciones Extraterrestres (3) Domingo Santos (3) EL RUIDO DE UN TRUENO (3) Fritz Leiber (3) Gordon R. Dickson (3) H. G. WELLS (3) Herbert George Wells. (3) Jack Vance (3) REINOS OLVIDADOS (3) Richard Awlinson (3) Robert f. young (3) alba de saturno (3) brian aldiss (3) damon knight (3) el enemigo (3) h.g.wells (3) j.g. ballard (3) las naves del tiempo (3) seleccion (3) stephen baxter (3) 100 años (2) 1ªparte (2) 2ªparte (2) ACTO DE NOVEDADES (2) ALGO PARA NOSOTROS (2) Afuera (2) Alfonso Linares (2) BESTIARIO DE CIENCIA FICCION (2) BILL (2) C. S. Lewis (2) CALIDOSCOPIO (2) CELEPHAÏS (2) CENTINELA (2) CHICKAMAUGA (2) CIUDAD IMPLACABLE (2) CUANDO LA TIERRA ESTÉ MUERTA (2) CURA A MI HIJA (2) Cuentos (2) DELENDA EST... (2) DEUS IRAE (2) EL ASESINO (2) EL CENTINELA (2) EL HOMBRE BICENTENARIO (2) EL JOVEN ZAPHOD Y UN TRABAJO SEGURO (2) EL ULTIMO CONTINENTE (2) EL UNICO JUEGO ENTRE LOS HOMBRES (2) El proyecto Prometeo (2) El viaje más largo (2) Fuera de Aquí (2) Fundacion (2) H. P. LOVECRAFT (2) HEREJÍAS DEL DIOS INMENSO (2) HOMBRES y DRAGONES (2) IVAR JORGENSON (2) James Blish (2) John W. Campbell (2) Jr. (2) Juan G. Atienza (2) LAS DORADAS MANZANAS DEL SOL (2) LOS POSESOS (2) La Última Pregunta (2) MUTANTE (2) Masa Crítica (2) No habrá otro mañana (2) Norman Spinrad (2) OBRAS ESCOGIDAS (2) PREMIO HUGO (2) Podemos Recordarlo Todo por Usted (2) REFUGIADO (2) Robert Bloch (2) RÉQUIEM POR UN DIOS MORTAL (2) TEMPONAUTAS (2) ULTIMÁTUM A LA TIERRA (2) VALIENTE PARA SER REY (2) Valentina Zuravleva (2) WARD MOORE (2) ZOTHIQUE (2) algunas clases de vida (2) anochecer (2) antologia (2) avatar (2) belen (2) ciberpunk (2) csifi (2) cuentos cortos (2) el abismo del espaciotiempo (2) el astronauta muerto (2) el factor letal (2) el idolo oscuro (2) el joven zaphod (2) el orinal florido (2) el tiempo es el traidor (2) enlaces (2) entreprise (2) fantasia (2) frederick pohl (2) fundacion y tierra (2) guia del autoestopista galactico (2) howard fast (2) la clave (2) la guerra de las galaxias (2) la maquina del tiempo (2) la rata de acero inoxidable te necesita (2) los depredadores del mar (2) los espadachines de varnis (2) los superjuguetes duran todo el verano (2) lovecraft (2) minority report (2) paul anderson (2) pesadilla despierto (2) robot CITY (2) varios (2) volvere ayer (2) ¿quo vadis? (2) ÁNGELES TUTELARES (2) ..... (1) 03 (1) 2 (1) 2001 (1) 2001 - UNA ODISEA ESPACIAL (1) 2001.una odisea espacal (1) 2001: UNA ODISEA DEL ESPACIO (1) 2010:odisea dos (1) 27/09/2010 (1) 2ª parte de Guardianes del tiempo (1) 30 Días Tenía Septiembre (1) 3ªparte (1) ? (1) A LO MARCIANO (1) A. E. VAN VOGT (1) A. Hyatt Verrill (1) ABUELITO (1) AC (1) ACCIDENTE DE CHERNOBIL (1) ACCIDENTE NUCLEAR (1) ADIÓS (1) ADIÓS VINCENT (1) AGENTE DEL CAOS (1) AGUARDANDO AL AÑO PASADO (1) AGUAS SALOBRES (1) ALFANA Philip K. Dick (1) ALGUIEN ME APRECIA AHÍ ARRIBA (1) ALGUNAS PECULIARIDADES DE LOS OJOS (1) ALMURIC (1) AMANECER EN MERCURIO (1) ANTES DEL EDEN (1) AQUÍ YACE EL WUB (1) ATAQUE DESDE LA CUARTA DIMENSION (1) AUTOMACIÓN (1) AUTOR AUTOR (1) AVERíA (1) Abandonado en Marte (1) Adam Villiers (1) Aguas Profundas (1) Al Estilo Extraterrestre (1) Alan Barclay (1) Alberto Vanasco (1) Alfonso Álvarez Villar (1) Aventura en la Luna (1) Avram Davidson (1) BILL EN EL PLANETA DE LOS 10.000 BARES (1) BILL EN EL PLANETA DE LOS CEREBROS EMBOTELLADOS (1) BILL EN EL PLANETA DE LOS ESCLAVOS ROBOTS (1) BILL EN EL PLANETA DE LOS PLACERES INSIPIDOS (1) BILL EN EL PLANETA DE LOS VAMPIROS ZOMBIS (1) BUENAS NOTICIAS (1) BUENAS NOTICIAS DEL VATICANO (1) BUTTON (1) Barry Longyear (1) Barry N. Malzberg (1) Basilisk (1) Bill. El Final De La Epopeya (1) Brian Daley (1) Bóvedas de acero (1) CABALLEROS PERMANEZCAN SENTADOS (1) CADBURY EL CASTOR QUE FRACASÓ (1) CADENAS DE AIRE TELARAÑAS DE ÉTER (1) CANDY MAN (1) CANTATA (1) CARGO DE SUPLENTE MÁXIMO (1) CHERNOBIL (1) CIBERIADA (1) CIENCIA FICClON (1) CIENCIA-FICCION (1) CIENCIA-FICClON NORTEAMERICANA (1) CLIFFORD D. SIMAK (1) COLONIA (1) COMPRAMOS GENTE (1) CONFESIONES DE UN ARTISTA DE MIERDA (1) CONFUSIÓN EN EL HOSPITAL (1) COSA CERCANA (1) COTO DE CAZA (1) CREADOR .DAVID LAKE. (1) CUAL PLAGA DE LANGOSTA (1) Carol Emshwiller (1) Christopher Anvil (1) Ciencia Ficción (1) Ciencia-Ficción (1) Cleon el emperador (1) Clive Jackson (1) Cordwainer Smith (1) Cosas (1) Crónicas Marcianas (1) Cuerpo de investigación (1) Cuidado (1) Cómo Descubrimos Los Números (1) DANIEL F. GALOUYE (1) DESAJUSTE (1) DESAYUNO EN EL CREPÚSCULO (1) DETRÁS DE LA PUERTA (1) DIMENSIONAJE (1) DR. BLOODMONEY (1) Dan Simmons (1) David R. Bunch (1) Delenda Est (1) Dentro del cometa (1) Descargo de responsabilidad (1) Dominios remotos (1) Donald F. Glut (1) E. B. White (1) EL ABONADO (1) EL AHORCADO (1) EL AMO A MUERTO (1) EL ANDANTE-PARLANTE HOMBRE-SIN-PENA (1) EL ARBOL DE SALIVA (1) EL ARTEFACTO PRECIOSO (1) EL BACILO ROBADO Y OTROS INCIDENTES (1) EL CASO RAUTAVAARA (1) EL CLIENTE PERFECTO (1) EL CONSTRUCTOR (1) EL CRIMEN Y LA GLORIA DEL COMANDANTE SUZDAL (1) EL CUENTO FINAL DE TODOS LOS CUENTOS DE LA ANTOLOGÍA VISIONES PELIGROSAS DE HARLAN ELLISON (1) EL DEDO DEL MONO (1) EL DERECHO A LA MUERTE (1) EL DIA DE LOS CAZADORES (1) EL DÍA QUE EL SR. COMPUTADORA SE CAYÓ DE SU ÁRBOL (1) EL FABRICANTE DE CAPUCHAS (1) EL FLAUTISTA (1) EL GRAN C (1) EL GRAN INCENDIO (1) EL HOMBRE DORADO (1) EL HOMBRE PI (1) EL HURKLE (1) EL HÉROE GALÁCTICO ¡EL FINAL DE LA EPOPEYA! (1) EL JUEGO DE ENDER (1) EL LIBRO SECRETO DE HARAD IV (1) EL MUNDO CONTRA RELOJ (1) EL NUMERO QUE SE HA ALCANZADO (1) EL NÁUFRAGO (1) EL OBSERVADOR (1) EL OCASO DE LOS MITOS (1) EL PACIFISTA (1) EL PADRE-COSA (1) EL PEATÓN (1) EL PLANETA IMPOSIBLE (1) EL SEGUNDO VIAJE A MARTE (1) EL SHA GUIDO G. (1) EL SISTEMA SOLAR INTERIOR (1) EL SONDEADOR DE TUMBAS (1) EL ÍDOLO OSCURO (1) EL ÚLTIMO EXPERTO (1) EN PUERTO MARTE Y SIN HILDA (1) ENERGIA NUCLEAR (1) ESTACION DE TRANSITO (1) ESTACION DE TRANSITO 2ª PARTE (1) ESTACIÓN DE TRANSITO (1) EXILIO (1) Edgar Rice Burroughs (1) Edwin Balmer (1) El Electrobardo de Trurl (1) El Ordenador Encantado y el Papa Androide (1) El Parque de Juegos (1) El Planeta Perdido (1) El Regalo de los Terrestres (1) El Ruido del Trueno (1) El ataque del bebé gigante (1) El año del Rescate (1) El canto del chivo (1) El cuento de navidad de Auggie Wren (1) El efecto entropía (1) El exterminador (1) El fin de la eternidad (1) El gambito de los klingon (1) El pesar de Odín el Godo (1) El robot que quería aprender (1) El valor de ser un rey (1) El verano del cohete (1) El árbol de la vida (1) Encuentro final (1) Espacio oscuro (1) Esta noche se rebelan las estrellas (1) Estrella del mar (1) FABULAS DE ROBOTS PARA NO ROBOTS (1) FANTASÍAS DE LA ERA ATÓMICA (1) FLORES DE CRISTAL (1) FUNDACION 1º (1) Farenheit 451 (1) Fases (1) Floyd L. Wallace (1) Formación de la República (1) Fuego negro (1) GASOLINERA GALACTICA (1) GRUPO GALÁCTICO (1) GUERRA DE ALADOS (1) GUERRA TIBIA (1) GUIA DEL AUTOESTOPISTA GALACTICO (1) Gardner F. Fox (1) George Orwell (1) Guion Blade Runner (1) Guión para Alíen III (1) HEMOS LLEGADO (1) HF (1) HOLA Y ADIÓS (1) Harry Bates (1) Herbert George Wells (1) Historia del hombre que era demasiado perezoso para fracasar (1) Huérfanos de la Hélice (1) HÁGASE LA OSCURIDAD (1) HÉROE GALÁCTICO (1) ICARO DE LAS TINIEBLAS (1) IMPERIOS GALÁCTICOS (1) IMPERIOS GALÁCTICOS I (1) INVISIBILIDAD (1) Invariable (1) J.G.Ballard (1) JACINTO MOLINA (1) Jinetes de la Antorcha (1) John Kippax (1) John R. Pierce (1) Julio Cortázar (1) Kit Reed (1) LA BRUJA DE ABRIL (1) LA CRIBA (1) LA FRUTA EN EL FONDO DEL TAZÓN (1) LA GRANJA EXPERIMENTAL (1) LA LUNA (1) LA MÁSCARA (1) LA NUBE DE LA VIDA (1) LA PAREJA QUE AMABA LA SOLEDAD (1) LA PREGUNTA QUO (1) LA PRUEBA SUPREMA (1) LA RUINA DE LONDRES (1) LA SEGUNDA LEY (1) LA SIRENA (1) LA TIERRA (1) LA VIDA YA NO ES COMO ANTES (1) LARRY NIVEN (1) LAS ARMERÍAS DE ISHER (1) LAS PALABRAS DE GURU (1) LAS TUMBAS DE TIEMPO (1) LAZARUS II (1) LO QUE DICEN LOS MUERTOS (1) LO QUE SUCEDIÓ POR BEBER AGUA (1) LOS CLANES DE LA LUNA (1) LOS HOMBRES METÁLICOS (1) LOS HOMBRES QUE ASESINARON A MAHOMA (1) LOS IMPOSTORES (1) LOS INTERMEDIOS (1) La Fe de nuestros padres (1) La Hormiga Eléctrica (1) La Luz de las Tinieblas (1) La historia de Martín Vilalta (1) La invasión de los hombres de los platillos volantes (1) La isla del Dr. Moreau (1) La máquina del tiempo (1) La última respuesta (1) La única partida en esta ciudad (1) Las Tablas Del Destino (1) Las cascadas de Gibraltar (1) Las corrientes del espacio (1) Los Santos (1) Los crímenes que conmovieron al mundo (1) Los hijos del mañana (1) Los malvados huyen (1) MANUSCRITO ENCONTRADO EN UNA BOTELLA DE CHAMPAGNE (1) MARIDOS (1) MARTE ENMASCARADO (1) MAS ALLÁ DE LAS ESTRELLAS (1) MATRIARCADO (1) MINICUENTOS DE CRONOPIOS (1) MINORITY REPORT (1) MUCHO.MUCHO TIEMPO (1) MUÑECOS CÓSMICOS (1) Mario Levrero (1) Medida de seguridad (1) Miriam Allen de Ford (1) Mucho mucho tiempo (1) Mundos cercanos (1) Murray Leinster (1) NECROLÓGICA (1) NO MIRES ATRÁS (1) NORTEAMERICANA (1) NUESTROS AMIGOS DE FROLIK 8 (1) OH (1) Objetivo la Tierra (1) Octavia E. Butler (1) PAUL NASCHY (1) PLENISOL (1) POST BOMBUM (1) POUL ANDERSON (1) PREMO (1) PROXIMA CENTAURI (1) Pamela Sargent (1) Patrulla del Tiempo (1) Paul W. Fairman (1) Perdido en el banco de memoria (1) Persiguiendo a Bukowski (1) Philip Wylie (1) Phillip K. Dick (1) Polvo mortal (1) Prohibida la entrada (1) R. A. Lafferty (1) RECUERDO A BABILONIA (1) Ray Bradubury (1) Razon (1) Richard Wilson (1) Robert Barr (1) Robert E. Howard (1) Roger Zelazny (1) SACRIFICIO (1) SATURNO (1) SCI-FI SPECIAL - CAMPAÑA PUBLICITARIA (1) SCI-FI SPECIAL.EL CAÑÓN (1) SER UN BLOBEL (1) SFI-FY (1) SIMULACRON-3 (1) SNAKE (1) STEPHEN KING (1) SUPERTOYS LAST ALL SUMMER LONG (1) Sale Saturno (1) Sangre (1) Scifiworld (1) Selección (1) Shakespeare de los monos (1) Si encuentran ustedes este mundo malo deberían ver algunos de los otros (1) Sitges 2011 (1) Solamente Un Eco (1) Soldado no preguntes (1) Stanislaw Lem (1) Star Trek/4 (1) Star Trek/6 (1) Star Trek/7 (1) Starship Troopers (1) Sucedió mañana (1) Sueñan los androides con ovejas eléctricas (1) TANTRA (1) THE THING FROM ANOTHER WORLD (1) TODO VA BIEN (1) TOREO TELEDIRIGIDO (1) TRASPLANTE EXPERIMENTAL (1) Talento (1) Tantras (1) The Best of Jack Vance (1) The Empire Strikes Back (1) Tomás Salvador (1) Treinta Días Tenía Septiembre (1) Tres relatos (1) UN AS DEL AJEDREZ (1) UN AUTOR PRETENDE HABER VISTO A DIOS PERO NO PUEDE EXPLICAR LO QUE HA VISTO. (1) UN TRABAJO SEGURO (1) UNA ODISEA ESPACIAL (1) URSULA K. LEGUIN (1) Un Trozo de Noche (1) Una Princesa De Marte (1) VETERANO DE GUERRA (1) VICTOR HUGO (1) VIERNES (1) VINCENT (1) VINIERON DEL ESPACIO EXTERIOR (1) VOLVERÉ AYER (1) VOTACION JERARQUICA (1) Vance Aandahl (1) Viernes 13 (1) Vivian Ibarra (1) Volumen I de Avatar (1) Volumen II de Avatar (1) Volumen III de Avatar (1) Vonda N. Mclntyre (1) W.G. Wells (1) William Gibson (1) Y la Roca Gritó (1) YO OS SALUDO (1) Yo robot (1) ZAPHOD Y UN TRABAJO SEGURO (1) a.beltran chandler (1) a.e.van vogt (1) alan dean foster (1) alerta (1) alguien me aprecia ahi arriba (1) alien mind (1) alto (1) amanece en mercurio (1) amarillo (1) ambrose bierce (1) amor.i love... (1) andre carneiro (1) antigravedad (1) aprended geometria (1) aprendiz de jedi (1) astronauta (1) atipico (1) autor. autor (1) aventuras (1) ayuda alienigena (1) azael (1) azul (1) babel-17 (1) bajo (1) bautizo (1) biografia (1) blanco (1) borges (1) ciberia (1) ciberpuk (1) ciencia ficcion (1) cirncia ficcion (1) ciudad (1) coeficiente intelectual (1) coleccion (1) comienzo (1) compre jupiter (1) computador (1) constelacion (1) crono (1) cronopolis (1) cuando chocan los mundos (1) cuando la tierra este muerta (1) cumpleaños (1) cómo ocurrió (1) dark vader (1) delfos (1) demonio (1) edward bryant (1) el arbol de la buena muerte (1) el brujo cautivo (1) el color de mas alla del espacio (1) el cuento final (1) el detalle (1) el dia de los trifidos (1) el dragon (1) el experimento (1) el experimento maligno (1) el hacedor de universos (1) el hombre del agujero (1) el hombre mecanico (1) el imperio contra ataca (1) el jardin del tiempo (1) el mundo de satan (1) el pacto de la corona (1) el pasado muerto (1) el pesar de odin el godo (1) el planeta errante (1) el renegado (1) en (1) enterprise (1) eric lavin (1) espacio (1) estraterrestre (1) exiliados al infierno (1) f.valverde torne (1) fantasma (1) fenix brillante (1) fin (1) fred saberhagen (1) fredic brown (1) fritz leibert (1) google (1) gris (1) grupo galactico (1) guardianes del tiempo ii (1) guerras (1) h.p (1) hageland (1) hector g.oesterheld (1) hijo de sangre (1) historia ficcion (1) historias de un futuro projimo (1) humillacion (1) imagenes (1) iq (1) john boorman (1) john e.muller (1) john varley (1) julio de miguel (1) la aventura del asesino metalico (1) la batalla final (1) la calavera (1) la cruzada de liberty (1) la espada oscura (1) la hormiga electrica (1) la jaula (1) la luz (1) la mente alien (1) la morada de la vida (1) la máquina de cazar (1) la oscuridad (1) la piedra de las estrellas (1) la rata de acero inoxidable (1) la telaraña de los romulanos (1) la tumba del astronauta (1) la ultima medicina (1) la ultima pregunta (1) la vision del eden (1) las ruinas circulares (1) lester del rey (1) los hombres de la tierra (1) los hombres metalicos (1) los inmortales (1) ls criba (1) luna de miel en el infierno (1) luz de otro dia (1) marte (1) martin amis (1) moscas (1) niebla.hierba y arena (1) no habra tregua para los reyes (1) noche de verano (1) normal (1) norteamericano (1) novela (1) novela corta (1) novelas (1) ofiuco (1) oraculo (1) original pelicula bladerunner (1) otros (1) ovni (1) paul auster (1) perturbacion solar (1) pesadilla en rojo (1) philip j.farmer (1) planeta prohibido (1) policia 1999´ (1) polis (1) portico (1) postnuclear (1) psifi (1) punto decisivo (1) ratas espaciales (1) recopilador (1) replicantes (1) requiem por un dios mortal (1) retato (1) robin scott (1) robots (1) rojo (1) rusa (1) saliva (1) samuel r. delany (1) segunda fundacion (1) sida (1) slan (1) srar treck (1) stanley weinbaum (1) star trek/8 (1) starcraft (1) tanque comun n.º2 (1) tenefonía móvil (1) terrestre (1) tiempo (1) tragedia en el dark star (1) trangulo (1) una cruz de siglos (1) una galaxia llamada Roma (1) una marciana tonta (1) una odisea marciana (1) vale la pena leerme (1) venganza (1) verde (1) viajeros en el tiempo (1) viajes en el tiempo (1) viajes temporales (1) vih (1) vinieron del espacio esterior (1) vol.1 (1) wallpapers (1) y la roca grito (1) y mañana seran clones (1) yo os saludo.maridos (1) zardoz (1) ¡TIGRE! ¡TIGRE! (1) ¿Dónde están los dioses?busquedas (1) ¿HABRA SIDO UN ANDROIDE? (1) ¿LE IMPORTA A UNA ABEJA? (1) ¿QUIERE USTED ESPERAR? (1) ¿Quién hay ahí? (1) Ábrete a Mí. Hermana Mía (1)

-

GALERIAS/IMAGENES/WALLPAPERS/AVATARS

GALERIA 1 GALERIA 2 GALERIA 3 GALERIA 4 GALERIA 5 GALERIA 6 GALERIA 7 GALERIA 8 GALERIA 9 GALERIA 10 GALERIA 11 GALERIA 12 GALERIA 13 GALERIA 14 GALERIA 15 GALERIA 16 GALERIA 17 GALERIA 18 GALERIA 19 GALERIA 20 GALERIA 21 GALERIA 22 GALERIA 23 GALERIA 24 GALERIA 25 GALERIA 26 GALERIA 27 GALERIA 28 GALERIA 29 GALERIA 30 GALERIA 31 GALERIA 32 GALERIA 33 GALERIA 34 GALERIA 35 GALERIA 36 GALERIA 37 GALERIA 38 GALERIA 39 GALERIA 40 GALERIA 41 GALERIA 42 GALERIA 43 GALERIA 44 GALERIA 45 ENTREVISTA CON EL VAMPIRO

GOTICO

↑ Grab este animador del título

EL MUNDO AVATAR

↑ Grab este animador del título

100 AUTORES

↑ Grab este animador del título

666

↑ Grab este animador del título

A CUERDA Y CUCHILLO

↑ Grab este animador del título

APOCRIFOS-GNOSTICOS

↑ Grab este animador del título

ART-HUMAN-LIGUE

↑ Grab este animador del título

BUSQUEDAS/PETICIONES

↑ Grab este animador del título

CLOUD

↑ Grab este animador del título

DARK BIOGRAFHY

↑ Grab este animador del título

DESDE EL LADO OBSCURO

↑ Grab este animador del título

EL BARDO

↑ Grab este animador del título

EL MUNDO AVATAR 2

↑ Grab este animador del título

EN LOS LIMITES DE LA REALIDAD

↑ Grab este animador del título

HABLANDO

↑ Grab este animador del título

IMAGENES DE CULTO

↑ Grab este animador del título

LA BIBLIOTECA SIGLO XXI

↑ Grab este animador del título

LA ESCUELA DE LA OSCURIDAD

↑ Grab este animador del título

LICENCIAS ,CONDICIONES Y POLITICA DE CONTENIDOS

↑ Grab este animador del título

LINKS - ENLACES

↑ Grab este animador del título

La Vida....vivir con Sida

↑ Grab este animador del título

MADE IN JAPAN // ORIENTE

↑ Grab este animador del título

MITOS Y LEYENDAS

↑ Grab este animador del título

RIMAS , FRASES , CITAS ...

↑ Grab este animador del título

SCI-FI SPECIAL

↑ Grab este animador del título

SIR SNAKE PETER PUNK

↑ Grab este animador del título

SUCESOS

↑ Grab este animador del título

THE DARK-SIDE // LITERATURA // ESCRITOS

↑ Grab este animador del título

TODO AVATARS

↑ Grab este animador del título

UN POCO DE ... " TODO "

↑ Grab este animador del título

UTILIDADES Y "CURIOSIDADES"

↑ Grab este animador del título

EL CUENTACUENTOS

↑ Grab este animador del título

Powered By Blogger

.

¡Gana Dinero con MePagan.com!